Por lo general, cuando se habla del sistema digestivo, de inmediato se viene a la mente todo lo que está relacionado por el tracto intestinal, como el páncreas, el hígado y la vesícula biliar. Lo que muchos no saben, es que el sistema digestivo está compuesto por una serie de órganos unidos entre sí.
Y como ocurre con mucha de las funciones corporales que tienen lugar cada día de manera automática, la digestión es imprescindible para la salud de las personas, tanto la física como mental.
En este contexto, según la autora del libro, “Siente lo que comes”, la Dra. Amanda Rodríguez-Urrutia, asegura que la conexión entre el eje cerebro- intestino-microbiota, incluye el sistema nervioso central, los sistema endocrino e inmunitario, el sistema nervioso autónomo, el sistema nervioso entérico y la microbiota intestinal.
Ahora, para comprender mejor los conceptos recién mencionados, hay que tener en cuenta que estos elementos interactúan y crean una compleja red bidireccional, que puede lograr que las señales del cerebro influyan en las modalidades motora, sensorial y secretora del intestino, y a la inversa, los mensajes viscerales pueden influir en la función cerebral.
Por eso, expertos del área de la salud señalan que, si la microbiota se desequilibra, o si el sistema nervioso entérico se desregula, puede afectar otras partes del cuerpo y provocar alteraciones en el estado mental y emocional de una persona.
La Dra. Rodríguez, también es enfática en señalar que, “una microbiota alterada puede alterar las hormonas que afectan al sueño, y así repercutir en las vías circadianas, o bien, puede modificar las vías de inflamación en influir en el cerebro, generando estados de irritabilidad”.
La comunicación entre el cerebro y el sistema nervioso son continuas, a través del eje cerebro-intestino- microbiota que recién mencionamos. Según investigaciones científicas, como el artículo, “El eje microbiota-intestino-cerebro y sus grandes proyecciones”, de M. Gómez-Eguílaz, J.L. Ramón-Trapero, L. Pérez-Martínez, J.R. Blanco, se sabe que se trata de un sistema que se comunica con muchos tipos de células como las células epiteliales (que son las que recubren superficies del cuerpo, están en la piel en los vasos sanguíneos, el tracto urinario, y los órganos), también células endocrinas e inmunitarias intestinales, para influir en diversas respuestas fisiológicas en el intestino.
En conclusión, por mucho tiempo, la idea de que el cerebro se relacionaba de manera unidireccional con el sistema digestivo, y que el sistema nervioso era más bien periférico. Sin embargo, en la actualidad podemos observar mucho mejor su relación.
“Si se altera el cerebro, esto puede afectar al sistema digestivo y a los demás, pero las alteraciones del sistema nervioso entérico también pueden, a su vez, afectar al cerebro y a otros órganos mediante cascadas hormonales, neurales e inmunológicas”, señala la Dra. Rodríguez, quien a su vez reitera que todos los organismos son distintos, todos los cerebros funcionan de diferentes maneras, y todo lo que ocurre en el cuerpo es producto de entre dos cerebros que están conectados a través de las vías del cerebro-intestino, y mientras más equilibrados tengamos estos “dos cerebros”, mucho mejor se encontrará la salud.
Aquí es cuando mencionamos la relevancia de los probióticos en el día a día, primero que todo hay que considerar que los probióticos son el futuro de la alimentación consciente. Desde que aparecieron en Chile en 1998, se han desarrollado cada vez más productos innovadores, uno de ellos es BIORI, el cual nace para mejorar la salud y sistema inmune de todos los integrantes de la familia. Contiene microorganismos probióticos que son beneficiosos para el cuerpo.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), los probióticos son microorganismos vivos que viven en nuestro cuerpo y en alimentos fermentados, estos ejercen efectos beneficiosos en el cuerpo humano, más allá de la nutrición básica. Facilitan el proceso digestivo, mejoran la absorción de nutrientes y además refuerzan el sistema inmune, por lo tanto, cuidan la conexión entre el cerebro-intestino.
Cabe destacar que los probióticos son bacterias o levaduras no patógenas que, administrados en una dosis adecuada, refuerzan la salud, tanto a nivel digestivo como inmunitario. Es importante que cumplan con las siguientes características:
En este contexto, cabe destacar que Biori cumple con todas las expectativas de los expertos en el área de la nutrición y con lo que señala la OMS, ya que la ingesta diaria de este producto proporciona al organismo un billón de probióticos, ideal para proteger el sistema digestivo e inmunológico y así gozar de excelente salud.
Más información sobre Biori, se puede encontrar en https://biori.cl/ y en el Instagram (donde se puede encontrar una serie de recomendaciones y contenido sobre probióticos) https://www.instagram.com/biori.cl/ .
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Como los microorganismos, como tú y yo, como todo en la vida, Biori ha pasado por etapas de crecimiento y adaptación. Esta transformación es un reflejo de una nueva etapa, una más madura, que conoce mejor lo que tiene para ofrecer al mundo, pero con la misma alegría y vitalidad de siempre.